“Viva la Ciudad Heroica ”
¡Viva Ocros y Viva el Perú!
Los chilenos llegaron a Ocros el 20 de Enero de 1882, en número de 60 hombres armados, equipados y montados a caballo, al mando del Mayor Estéfano. Los chilenos llegaron a Ocros, guiados por Antonio Fiayo, yerno de Don Félix Mejía. Fiayo fue casado con doña Luisa Mejía y fue de origen ecuatoriana y él dio los datos necesarios al Mayor Estéfano, para que se desprenda del grueso del ejército chileno que estaba acantonada en numero de 1200 en Huacho.
El objetivo del ejército chileno para arribar a Ocros, fue la ambición del ganado vacuno que necesitaban para alimentar a las tropas que se encontraban en la provincia de Chancay.
El jefe chileno una vez que ocupo la plaza de Ocros, hizo llamar a las autoridades y les manifestó en forma prepotente que, el pueblo estaba impuesto con un cupo de 200 reses, que deberían de entregar en el término de 24 horas. En caso de no entregarse el número señalado, mandaría hacer recoger con la tropa y obtener por la fuerza.
El gobernador Juan Abarca y el Alcalde Municipal don Félix Mejía y otras personas notables del lugar, dialogaron en casa particular para dar respuesta al jefe invasor. Los dirigentes ocrosinos ante la insistencia de la tropa de tener a la vista con armas; hicieron recoger 100 reses de los diferentes cerros y las 100 que faltaban las tomaron prestados de los hermanos Juan y Bartolomé García, personas comerciantes y ganaderos que residían en Ocros que patriótica y humanamente aceptaron el pedido que hicieron los ciudadanos de la muy merecida Villa de Ocros, el conteo del ganado se realizó en el Cementerio del pueblo de Ocros.
La tropa chilena, permaneció en Ocros, dos días; abandono el pueblo llevándose el botín (la corona de Oro de la Virgen del Rosario y una campana) y los ganados: pero los montoneros de Ocros y Congas, al mando de los párrocos ocrosinos Matías Velásquez (el pico de oro) y Agustín Motta, en una marcha precipitada y forzada llegaron a las alturas llamado “Sauce” y los sorprendieron de galgas de rocas, armas de fuegos a los chilenos y ocasionaron una respuesta de lucha, cayeron al abismo al efecto de ellos 7 chilenos y solo dejaron a las reses a su propia suerte a los malos pasos de “Infiernillo” e “Puma Punco”
Los invasores chilenos araucanos, se escaparon con dirección quebrada abajo, hacia Caracha, Huanchay, Congón, Huaylias, Cochas y enfurecidos como una pantera prendieron fuego a todas las casas que existían en ese pueblito pintoresco, y luego, siguieron marcha desesperada a la costa, pensando volver más tarde a Ocros, por la ruta de Choque, para castigar en forma impecable a sus habitantes; hecho que no se realizo porque dicho ejercito fue llamado a Huacho, para entablar otra acción de armas, en otro lugar del país.
Posteriormente las autoridades y valientes sacerdotes que defendieron la Patria Chica, llamándolos “Ocros Ciudad Heroica” de la destrucción y depravaciones, nombraron Comandante de la Plaza de Ocros, a Juan Romero, quien armó 400 hombres para una defensa futura, los milicianos ocrosinos que estaban armados hasta los dientes y a la postre amotinaron contra su jefe.
Hubo divergencias entre las autoridades y la plana mayor de los ocrosinos, jefaturado por Máximo Argandoña. Unos opinaron que los milicianos armados, debían permanecer en Ocros, y otros deseaban que se dirigieran hacia las Pampas de Lampas, para plegarse al ejército del Coronel Leoncio Prado, que a la sazón se encontraba en ese lugar.
Es cierto que los milicianos, salieron con dirección a la Pampa de Lampas, por el camino de herradura a Chiquián, pero en el trayecto de la marcha se sublevaron contra su jefe y regresaron a Ocros, completamente desorganizados; y en ese estado de hechos fue muerto muy cerca al atrio de la Iglesia el acasino Daniel Pastrana, jefe de los montoneros de las Cuchillas, que pago con su vida por no plegarse a los de Ocros, en momento tal difíciles para la patria, los ocrosinos eran muy decididos por su valentía y amor a la tierra que lo vio nacer y al Perú.
Se dice que la corona de oro que poseía la Virgen del Rosario se perdió durante la invasión de los chilenos y una campana de la iglesia.
¡Olvidaremos esto, es parte de la historia!
“Viva la Ciudad Heroica”
¡Viva Ocros y Viva el Perú!
1883 en julio, el Coronel Leoncio Prado estuvo en Ocros, buscando hombres y víveres para ayudar al brujo de los andes Avelino Cáceres (nacido en Ocros de Ayacucho, muy cerca se encuentra también el pueblo de Chilcas y Ongoy) caso curioso ver mapa actual.
El Brujo de los Andes “Avelino Caceres” tuvo la oportunidad de pasar por Ocros cuando vino de la sierra central pasando por Cajatambo - Ocros pernoctó y proseguir a Callejón de Huaylas (donde se realizaba la Batalla de Huaylas).
El Brujo de los Andes nos dijo, el Perú no ha perdido la guerra. Bajo este contexto Chile quiere Agua para sus desiertos y expansión territorial.
Nosotros tenemos la culpa, lo permitimos como bueno nuestros mares para su pesca y esto es pago o el resultado que quieren adueñarse, no no tiene ningún documento sustentatorio, a la mala quieren ser dueño.
Bolivia nos abondono en el momento de guerra con Chile; Bolivia hoy tambien tiene una parte del puerto de Ilo por muchos años¿Cómo y porqué?. a cambio de qué.
Si estuvieran presentes: Tupac Amaru, José Olaya, Quiñones, Caceres, Alfonso Ugarte, Bolognesi, Grau y otros que nos dirian en estos momentos.¡dirian ni un milímetro¡.
©Copyright: Edgar A.Espinoza M
Prohibido su reproducción total o parcial, sin la autorización de la representada.
Asesor Legal: Dr. José Rodríguez Ramírez